Ruta de los castillos y atalayas

Atalaya

La historia de esta comarca nos da una explicación de la red de castillos y atalayas que con sólo asomarse por la ventanilla del coche se puede atestiguar.

Durante el reinado de Al-Hakem II (822-852 d.C.) se edificó la red de atalayas para proteger el territorio de las invasiones de los pueblos del norte de Europa.

Castillo de Baena

Data del siglo IX. En la Edad Media, hasta la toma de Granada, fué un importante bastión fronterizo, época de procedencia del escudo de la localidad, consistente en cinco cabezas de moros. Aquí se alojaron los Reyes Católicos, y sufrió prisión Gonzalo Fernández de Córdoba (el Gran Capitán), y el último Rey de Granada y de Al-Andalus, Boabdil el Chico, tras ser capturado en la batalla de Lucena.

Castillo de Doña Mencía

Castillo de Luque

Reconstruido por Alvar Pérez de Castro, capitán de Fernando III, le otorgó el nombre de su esposa, Doña Mencía López de Haro.

Construido sobre los restos de una antigua fortaleza romana, en el siglo IX. Posteriormente se reconstruyó en época cristiana, posiblemente en el reinado de Alfonso XI, en el siglo XIV, como refuerzo contra el Reino de Granada.

Castillo de Zuheros

El castillo, en un espectacular roquedo, conserva los restos de un palacio renacentista, obra de Hernán Ruiz. De finales del siglo IX, reconstruido en el XI por los Ziríes, en el XII y posteriormente por los cristianos después de la conquista.

Castillo de Lucena

Monumento Histórico Nacional, por haber sido prisión del último Rey de Granada, Boabdil "el Chico".

Castillo de Cabra

La fortaleza, dentro de la cual se encuentra el Barrio de la Villa, de origen árabe sobre cimientos romanos, reformada de nuevo en época cristiana. La Torre del Homenaje, con más de 20 m de altura, fue reconstruida en 1515. Posteriormente, los Condes de Cabra habitaron el castillo hasta el siglo XVII, pasando a ser convento de franciscanos capuchinos.

Castillo de Iznájar

Con el nombre de Hisn Ashar nos llegan las primeras crónicas de este castillo, reconstruido en época árabe (posiblemente en el s. IX) sobre una fortaleza ya existente. Fué conquistado en 1362 por Pedro I El Cruel y reconquistado en 1366 por el Rey nazarí  de Granada Muhamad V, el mismo que ayudó al Rey cristiano en su conquista.

Torre del Canuto. En Rute, sobre el cerro del Hacho.

Castillo de Zambra. En la aldea del misno nombre, en el término municipal de Rute.

Castillo de Carcabuey

Primero una fortaleza romana, posteriormente árabe, el castillo actual fué reconstruido entre los siglos XIII y XIV, imprimió relevancia a esta localidad por su estratégica situación.

Castillo de El Algar: Sobre una colina cerca de la aldea del mismo nombre, en el término municipal de Carcabuey.

Castillo de Priego de Córdoba

De origen árabe, esta fortaleza de carácter militar básicamente se recontruyó entre los siglos XIII y XIV.

La Torre del Homenaje, monumento Histórico-Artístico Nacional, también llamada "Torre Gorda", tiene una altura de 30 metros, es posiblemente del siglo XIII, cuando Priego estaba bajo la encomienda de la Orden de Calatrava, auqnue posteriormente pasó de nuevo a manos nazaries en el siglo XIV, como lo atestiguan los capiteles de los ventanales.

En las cercanías de Priego de Córdoba hay varias atalayas, como son la Torre Alta, la torre de El Cañuelo, la que está entre El Cañuelo y El Tarajal, otra cercana a Fuente Alhama, la Torre de la Barca, o el Torreón El Mochón, en Campo Nubes.

Castillo de Alcaudete

Al-Qabdaq, ciudad de los manantiales, la nombraron así por su abundancia de agua, hasta que finalmente calló conquistada por los cristianos, esta fortaleza, que tomó fama de inaccesible, fué muy codiciada tanto por los cristianos como por los musulmanes, por albergar una medina con una actividad intensa por estar en una red viaria y comercial muy importante, por lo que desde que fuese por primera conquistada en 1085, cambió de manos varias veces en siglos posteriores. Fué reconstruida por la orden de Calatrava en el siglo XIV.

Castillo de Alcalá la Real

Por su enclave, desde que en el siglo VIII fué fortificada, Alcalá llegó a ser una importante ciudad fortificada en Al-Andalus, llegando a su máximo esplendor en el siglo XI. Cayó del lado cristiano por primera vez en 1213 a mano de Alfonso VIII, y, debido a su privilegiada situación, fué muy disputada, cambiando de religión sucesivamente hasta que, definitivamente, en 1340 fué conquistada por Alfonso XI. Este bastión fué aprovechado por los Reyes Católicos 150 años después para su ataque final a Granada. 

 En el recinto de la fortaleza se encuentra la iglesia abacial, reformada en el siglo XVI al igual que el castillo. La torre de 42 metros de altura es una demostración del poder de la fé católica tras su vistoria sobre la musulmana. Destaca en su interior las sepulturas abiertas en el suelo.

Alcalá también tiene numerosas atalayas en sus alrededores, como son  la torre del Pedregal, la torre de Abril, la torre de Charilla, la Torre de El Cascante, la torre de Fuente Álamo, la Torre de Guadalquita, la de la Dehesilla, la de la Moraleja, la de la Peña del Yeso, la de la Solana, la de las Mimbres, o la de Santa Ana.